domingo, julio 08, 2007

La economía gallega (IV): algunas reflexiones sobre el desarrollo del interior de Galicia (I)

Los lectores asiduos de esta página recordarán que la última entrada de esta serie estaba dedicada a la pugna entre La Coruña y Vigo resuelta casi de forma ineluctable a favor de aquélla. Hoy, sin embargo, aprovechando que he estado releyendo La urbanización del espacio rural en Galicia (OIKOS-TAU, 1997) del profesor Rodríguez González quería llamar su atención sobre la divergencia entre el interior y las zonas costeras de la región gallega. A pesar de ser un tema recurrente en la prensa regional, no me resisto a hacer un repaso de la situación.

Como todos ustedes saben es en las comarcas costeras donde se concentra la riqueza. Con datos del Ardán de 2006 -con las limitaciones que tiene esta fuente como ya explicamos en su día- observamos como la capacidad de generación de riqueza se reduce a unas pocas comarcas interiores: las capitales provinciales y sus áreas de influencia a las que cabe añadir una serie de territorios que han conseguido alcanzar un desarrollo debido a un conjunto de factores ya endógenos, ya exógenos que han permitido que se incorporen en mayor medida a los niveles de consumo de los lugares urbanos y/o costeros.

Antes de interesarnos por los diferentes casos individualmente, aspecto que trataremos en una anotación posteior, cabe señalar que en todas las comarcas se distingue. La consolidación comarcal se está llevando a cabo sobre el reforzamiento de una villa que actúa como nodo de comunicación entre las poblaciones de sus alrededores a la par que se erige en sede de las empresas de mayor tamaño y emplazamiento de los servicios del sector público. Como consecuencia de lo anteriormente aseverado se han convertido en los únicos municipios con cierto dinamismo demográfico -o al menos con pérdidas poblacionales menos acusadas- en un interior que pierde población acusadamente como apreciamos en algunos ejemplos mostrados en la siguiente tabla:


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